ea terapia asistida con animales se ha consolidado como una herramienta efectiva en el cuidado de las personas mayores. En una etapa de la vida en la que pueden presentarse situaciones de soledad, ansiedad o deterioro cognitivo, el contacto con animales puede marcar una gran diferencia en el bienestar emocional y físico.
En este artículo, te contamos los beneficios de la terapia con animales en personas mayores, cómo se implementa y por qué cada vez más centros especializados valoran este tipo de intervención.
¿Qué es la terapia asistida con animales?
La terapia asistida con animales (TAA) es una intervención planificada y estructurada que incorpora animales como parte del tratamiento terapéutico. Tiene como objetivo mejorar aspectos físicos, sociales, emocionales y cognitivos de las personas, especialmente de aquellas que presentan necesidades especiales, como en el caso de muchos mayores.
Los animales más comúnmente utilizados son perros, aunque también se emplean gatos, caballos, conejos e incluso aves, dependiendo del entorno y de las preferencias de los residentes. La clave está en que estos animales estén adiestrados, tengan un temperamento equilibrado y puedan generar un vínculo emocional positivo con la persona.
Beneficios físicos, cognitivos y emocionales de la terapia con animales
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Mejora de la salud física
Interactuar con animales puede contribuir de forma significativa a la mejora de la salud física de los mayores:
- Reducción de la presión arterial y del ritmo cardíaco.
- Estimulación del movimiento: pasear al perro o acariciarlo implica una leve pero valiosa actividad física.
- Mejor calidad del sueño, derivada de una sensación de compañía y seguridad.
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Estímulo cognitivo
El contacto con animales estimula la memoria, el lenguaje y la atención. Por ejemplo, recordar el nombre del animal, sus rutinas o contar anécdotas relacionadas con mascotas propias del pasado activa zonas del cerebro vinculadas con la memoria a largo plazo.
- Favorece la orientación temporal y espacial.
- Promueve el habla espontánea, sobre todo en personas con dificultades para comunicarse.
- Activa recuerdos significativos, ayudando en procesos de estimulación cognitiva en demencias leves.
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Bienestar emocional y social
Uno de los mayores beneficios de la terapia con animales en personas mayores se encuentra en el plano emocional. Muchos mayores se sienten solos o poco estimulados afectivamente. La presencia de un animal puede cambiar ese estado anímico de forma casi inmediata.
- Reduce la ansiedad y los síntomas depresivos.
- Fomenta la autoestima: sentirse útil y responsable del cuidado del animal.
- Aumenta la interacción social: los animales facilitan las conversaciones y el contacto entre residentes.
Modalidades de intervención con animales en residencias de mayores
Existen diferentes formas de implementar la terapia con animales en personas mayores. No se trata únicamente de visitas puntuales, sino de programas organizados y sostenibles en el tiempo.
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Terapia asistida con animales (TAA)
Programas planificados en los que un profesional de la salud (psicólogo, terapeuta ocupacional, fisioterapeuta) trabaja junto al animal y su guía para alcanzar objetivos terapéuticos específicos. Estas sesiones están orientadas a resultados medibles y se adaptan a cada usuario.
- Duración y frecuencia variable.
- Objetivos definidos desde el inicio.
- Supervisión profesional en todo momento.
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Actividades asistidas con animales (AAA)
A diferencia de la TAA, las actividades asistidas con animales no tienen un objetivo clínico concreto, pero sí buscan mejorar la calidad de vida y el bienestar emocional de los participantes.
- Pueden ser visitas periódicas de animales al centro.
- Favorecen la motivación y el entretenimiento.
- No requieren personal clínico, aunque sí personal capacitado en el manejo de los animales.
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Tendencia de animales en el centro residencial
Algunas residencias permiten la convivencia con mascotas propias o incorporan animales como parte estable del entorno.
- Requiere normativa interna clara.
- Implica una responsabilidad compartida.
- Puede generar vínculos duraderos y afecto continuo.
Requisitos y buenas prácticas para implementar la terapia con animales
Para que la terapia con animales en personas mayores sea segura, efectiva y beneficiosa, deben cumplirse ciertos criterios:
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Selección adecuada del animal
No todos los animales son aptos para este tipo de terapia. Deben tener un temperamento equilibrado, estar vacunados, desparasitados y entrenados para interactuar con personas mayores.
- Evaluación por profesionales veterinarios.
- Entrenamiento especializado.
- Sociabilidad y tolerancia a estímulos diversos.
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Formación del personal y coordinación interdisciplinar
El equipo del centro debe estar capacitado para acompañar este tipo de actividades y detectar signos de alerta en los residentes.
- Formación en terapia asistida con animales.
- Colaboración entre cuidadores, terapeutas y familiares.
- Evaluación constante de la evolución del residente.
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Seguridad e higiene
La seguridad y la salud de los residentes siempre deben ser la prioridad:
- Revisión periódica del estado de salud del animal.
- Espacios limpios y controlados.
- Cumplimiento de protocolos de higiene después del contacto con los animales.
Un enfoque complementario para el bienestar en la tercera edad
Aunque no todas las residencias de mayores implementan programas de terapia con animales, el creciente reconocimiento de sus beneficios hace que cada vez más centros valoren esta posibilidad como complemento terapéutico. El contacto con animales puede convertirse en una fuente constante de alegría, compañía y motivación, especialmente para quienes han convivido con mascotas a lo largo de su vida.
Terapia con animales en personas mayores
La terapia con animales en personas mayores es mucho más que una tendencia: es una herramienta poderosa para mejorar su calidad de vida. Los beneficios en el plano físico, emocional y social son numerosos y están respaldados por estudios y experiencias reales. En un momento vital en el que la conexión humana y el afecto son esenciales, el vínculo con un animal puede ser una fuente de consuelo, alegría y motivación.
En Residencia Albor, ubicada en Yeles, Toledo, estamos comprometidos con un enfoque integral del cuidado de las personas mayores, que contemple no solo sus necesidades médicas, sino también su bienestar emocional, sus hábitos, preferencias y autonomía. Por ello, en nuestra residencia en Toledo apoyamos todas aquellas iniciativas y prácticas que promuevan una vejez activa, saludable y feliz.